viernes, 30 de junio de 2017

en la carretera

sentada tras la ventanilla del autobús
en marcha
contra los cristales empapados por el rocío
a la luz de una luna casi gigante
y viendo la apacible belleza
efímera, indiscutible
de las ramas secas
las flores apenas abiertas
el pasto que acaba de morir,
percibiendo a ratos el pavimento
a ratos la completa oscuridad,
la sombra angosta de un camión que rueda
en sentido contrario
y rodeada de seres humanos
absortos en su soledad
en los pequeños detalles de su vida,
en los planes y balances del pasado
y el futuro,
lejos ya de los cantos de dolor que los cerdos
apaleados por sus dueños,
entonan al amanecer atrapados en sus jaulas,
lejos de las disputas vecinales
y las miserias
de la vida doméstica y la convivencia ajenas,
lejos del olor espantosamente humano
surgido de la mezcla de orines y restos de comida,
de sudor y ropa sucia,
de hacinamiento y basura descompuesta
no alcanzo a vislumbrar el día
la hora que no conocemos
porque apenas sale el sol el hombre se viste
se apertrecha en su máscara
y comercia con todo y con todos
sobre todas las cosas
y revisa minuciosamente su balanza
para entender los límites de su ganancia
o su pérdida
hasta que el hambre, el sueño, el deseo,
la noche,
caen nuevamente sobre su cabeza
y les permiten dormir naturalmente
sin aspiraciones ni deudas,
sin propósito,
en el único atisbo de libertad
que la vida civilizada nos concede.
🙏 😸😻😽

lunes, 5 de junio de 2017

déjà vu

algunas historias se repiten: cíclicas, abrumadoras, desconcertantes, absurdas. otras historias también se repiten, pero estamos demasiado absortos en la ilusión como para darnos cuenta.

gyate, gyate, hara gyatei
hara so gyate
bo hi so wa ka 🙏

😸😻😽